Niñas tenaces en cancha

La tenacidad permite doblegar adversidades camino al éxito. Recordemos cuando en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 las voleibolistas cubanas perdieron los dos sets iniciales ante Rusia y después le arrebataron la medalla de oro en aquel inolvidable 3-2.

Salvando la calidad y experiencia de juego que las separan de aquellas luminarias, las muchachas del Sub-18 de Cuba mostraron frente a Colombia en su partido de la Copa Panamericana que, desprovistas de fogueo, parecen rescatar las condiciones ausentes en las últimas versiones de la selección de mayores: entrega en el terreno, deseos de competir y camaradería.

Sin esos atributos, sería nulo el esfuerzo por extraer de ellas lo que hoy apremia al voleibol local: la promoción de valores capaces de contribuir a que Cuba vaya recuperando el sitial perdido en el orbe.

Líderes en su grupo eliminatorio B de esta Copa clasificatoria para el Campeonato Mundial de agosto en Argentina, en sus dos triunfos (descansaron este jueves) han acusado imprecisiones en distintos aspectos de su quehacer.

Ventajas en el marcador perdidas en un abrir y cerrar de ojos, fuerte ofensiva contrastante con deslices en otros elementos del juego que las llevan a incurrir en demasiados errores, la desconcentración en el servicio efectuado para molestar a las receptoras rivales, y la reiteración del pase a una misma atacadora tras el bloqueo que da continuidad a la acción, son aspectos por pulir en esta escuadra novata, urgida de continuar en ascenso si —a la par de los entrenamientos— aparecen otras oportunidades para medirse a conjuntos similares del planeta.

Ante el débil Costa Rica, los 22 errores no comprometieron el éxito en tres sets, pero Colombia fue harina de otro costal, pues 39 pifias por solo 16 de las cafeteras, en un desafío entre contendientes de calidad bastante pareja, trajo por consecuencia ir al cuarto set para ganar 3-1.

SURGE UNA LÍDER

La atacadora Ailama Cese se erige como la líder tan necesaria en los deportes colectivos. Sus 40 puntos en los dos encuentros, junto a los 31 de la capitana Elizabeth Vicet, sentaron pautas en un desempeño donde las centrales Yamisleidis Viltres y Daima del Río, podrían incrementar su aporte si les llegara en más oportunidades el pase de Thalia Moreno, quien a sus 14 años de edad (cumple 15 el 10 de abril) no se le puede pedir más. Sin embargo, su talla de 1,89 metros la sitúa con posibilidades de brillar en el futuro inmediato.

En la Copa Panamericana, los dos mejores primeros lugares de los tres grupos eliminatorios, clasifican directamente a semifinales. El otro líder, junto a los tres segundos puestos, dirimirán este viernes el par de plazas faltantes para completar el cuarteto de las semis.

Cuba encabezó la zona B, con nueve puntos. En la A, Argentina (cuatro unidades) vs. Puerto Rico (dos) disputaban el liderazgo, mientras República Dominicana vs. México, ambos dueños de diez puntos, discutían la supremacía en el apartado C al cierre de esta edición.