Toros triunfan en su valla

Los gritos de «¡Sí se puede!» desde las gradas del parque Cándido González en Ca­ma­güey retumbaron en toda la llanura agramontina, y los Toros, el elenco revelación de la 56 Serie Nacional de Béisbol, superaron a Las Tunas para nivelar (1-1) espectacularmente uno de los duelos de comodines del clásico de las bolas y los strikes.

Yariel Rodríguez, un bisoño prometedor (19 años), hizo soñar a la afición local desde el mismo capítulo inicial con lanzamientos certeros, ponches y un derroche de adrenalina en la lomita, pero los tuneros, más experimentados, fabricaron carreras a cuentagotas, una de ellas por jonrón del máscara Rafael Viñales, que silenció las tribunas en la tierra del Mayor.

Sin embargo, los camagüeyanos despertaron del letargo y tras 14 episodios sin pisar la goma, lograron rayar la tarjeta en el propio sexto capítulo, para luego en el inning de la suerte alcanzar el empate gracias a sencillo impulsor de Humberto Bravo, camarero que se ha cansado de batear en la primera ronda del campeonato.

Parecía que la balanza se inclinaba a los anfitriones, pero un lanzamiento «salvaje» del novato Josimar Cousin en el octavo rollo le abrió las puertas del home a Yordan Calaña, y los Leñadores tuneros tomaron la delantera con su cuarta carrera, aparentemente definitiva, pero los agramontinos mon­taron un festival en la conclusión de la propia entrada y le dieron la vuelta al mundo.

Los líderes naturales del plantel, Héctor Her­nández y Alexander Ayala, abrieron fuego, el primero con arriesgadas carreras hasta se­gunda y luego al plato con un rolling al cuadro. Su velocidad (robó 16 bases en el torneo) le permitió empatar la pizarra, volteada por completo minutos más tarde por un héroe improbable.

Yosbel Pérez, jugador que solo había tenido 19 apariciones en el cajón de bateo durante la contienda clasificatoria, despachó cohete al central como emergente y la locura se desató en el Cándido González, que por fin vivió una noche de gloria luego de muchos años.

Este miércoles será el tercer y definitivo pleito del duelo de comodines, en el que Camagüey buscará, de nuevo en su patio, llevarse el triunfo que lo coloque entre los seis grandes de la lid, lo cual representaría su mejor actuación en Series Nacionales desde aquel tercer escaño conseguido en la edición 40 del campeonato, hace más de 15 años.