Ronaldo por la gloria, Alemania por la contundencia

¿Quién ganará la Eurocopa 2016? Esa es una de las preguntas de moda por estos días en cientos de lugares alrededor del mundo. Desde este miércoles arranca la etapa semifinal con el duelo entre Gales y Portugal, mientras mañana serán Francia- Ale­mania, sin que en ningún caso se vislumbre un gran favorito para la corona.

Se trata de dos enfrentamientos que tienen su propio condimento. Por un lado Gales, debutante en etapas finales de Eurocopas, buscará desbancar a los lusos, a pesar de no contar con el mediocampista Aaron Ramsey por acumulación de amarillas. Para el encuentro, los Dragones Ro­jos necesitarán que su estrella Ga­reth Bale brille con luz propia y haga estragos a sus rivales con sus habituales galopadas, en tanto la defensa británica tendrá la difícil misión de controlar las internadas a pura velocidad de Cristiano Ronaldo y Nani.

Del lado lusitano existen amplias posibilidades para que el líder en la zaga, Pepe, no juegue debido a una fatiga muscular, ausencia que se su­maría a la de su pareja en funciones defensivas, Ricardo Carval­ho, por lo que esperaremos hasta último mo­mento para ver qué decide el entrenador Fernando Santos.

Uno que no se perderá el compromiso bajo ninguna circunstancia es Cristiano Ronaldo. La estrella del Real Madrid está consciente de que se encuentra a las puertas de disputar su segunda y posiblemente última final europea a nivel de países, por lo que tiene la ambición necesaria para acabar de cimentar su nombre entre los mejores en la historia del fútbol. De ganar la Euro se posicionaría al lado de Maradona y Pelé sin discusión alguna, atendiendo a sus tres balones de oro conquistados como mejor futbolista del mundo.

Si Gales vs. Portugal es un match que centra la mirada casi exclusivamente en Bale y CR7, el choque entre galos y germanos tendrá una variedad mucho mayor, atendiendo al talento que ambos elencos conservan en sus filas.

Francia, como local, no ha perdido los tres últimos eventos futbolísticos que ha organizado —Euro de 1984, Copa Mundial de 1998 y Copa Confederaciones del 2003— y comprende que si supera a los actuales campeones mundiales las opciones de victoria aumentarán considerablemente en su favor. Para alcanzar dicho objetivo necesitan que la dupla en la media cancha de Paul Pogba y Blaise Matuidi logre cortar el juego creativo de los alemanes, y evitar así que su inestable de­fensa deba hacer frente a los alemanes en el ataque.

De Alemania no hay mucho que decir, torneo en el que participan torneo en el que son favoritos, aunque no presente un gran equipo. En esta oportunidad el fantasma de las lesiones acosa a su plantilla, pero si existe una selección capaz de sobreponerse a tales adversidades es esta.

La llamada “Mannschaft” cuenta con gran seguridad en el arco, gracias a Manuel Neuer, además dispone de excelentes jugadores en la retaguardia y abundantes opciones en la zona de creación; solo necesitan que su delantero Thomas Müller despierte de su sequía goleadora. De salir el número 13 de esa racha negativa, resultará casi imposible doblegar al conjunto que dirige Joachím Löw.