Sin complejos y con mucho orden sobre la cancha, la selección de Irlanda de Norte obtuvo su primer triunfo en fases finales de una Eurocopa, al sorprender a la favorita Ucrania por 2-0 este jueves y casi asegurarle su pasaje de regreso a casa.
Conciente de sus debilidades ofensivas, los norirlandeses esperaron pacientemente por sus oportunidades en cancha propia Esa táctica, aunque no rindió todos sus dividendos en la primera parte demostró ser viable, luego que los de verde llegaran en par de ocasiones con mucho peligro a las cercanías del arco contrario.
Ucrania, favorita en los papeles, dominó con claridad en el medio campo, pero le faltó agresividad en los 45 minutos iniciales. Movían el balón sin demasiado peligro, al punto que por momentos el choque rozó el aburrimiento.
La poca inoperancia en ataque de los ucranianos les pasó factura, cuando el defensor Gareth McAuley les encajó, de cabeza, el primer gol tras adelantarse a su marcador en pleno corazón del área, al minuto 49.
El tanto norirlandés, no hizo cambiar el guión del compromiso, Ucrania siguió llevando el mando, pero con demasiadas imprecisiones en los metros finales, con su cerebro Yevhen Konoplyanka, desacertado en ataque.
Entonces optaron por los remates de media distancia, pero el guardameta Michael McGovern se erigió en un autentico muro. También buscaron abrir las bandas, pero Irlanda del Norte siguió firme en su posicionamiento táctico, en el que sus jugadores se relevaban para defender cada pelota suelta.
Con el prolongado tiempo de descuento conferido por el árbitro checo Pavel Kralovec, a causa de una granizada que hizo detener el juego por algo más de cinco minutos, se produjo el tanto de la sentencia norirlandés, luego que Nial McGuinn recogió un rechazo del arquero ucraniano y lo mandó a guardar a la portería.
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