Denia Caballero: “Halé con todo ese primer disparo”

Denia Caballero se las ingenió para con un disparo inicial de 69.28 metros silenciar el Nido de Pájaro de Beijing, desmoronar el imperio de la croata  Sandra Perkovic (67.39) y soportar los embates de la legión alemana, con la experimentada de 30 años Nadine Müller (65.53) a la cabeza. Después hizo que se escucharan las notas del himno nacional cubano y entre las dos torres ocupantes del segundo y tercer puesto, esta mulata villaclareña de 1.76 metros y 81 kilogramo, les regaló a todos una sonrisa.

 “Ese primer disparo lo halé con todo, aún me pregunto por qué caí, quizá por la potencia que intenté imprimirle al final del giro. El objetivo era ese, abrir fuerte para presionar a las adversarias… y funcionó”, declaró vía Facebook la discípula de Raúl Calderón.

“Luego me golpeó la migraña, me dolía mucho la cabeza, creo que se me combinó con la descompresión, no pude repetir otro lanzamiento tan largo, pero la secuencia la mantuve estable”, añadió la atleta, quien aseguró buscará propinarle otra estocada a la Perkovic en la final de la Liga de Diamante de Bruselas, el próximo 11 de septiembre.

En el Gigante asiático, todos siguieron la órbita de su disco en ese primer envío, en el que casi se sale del círculo tras el impulso final. Su secuencia continuó con envíos de 63.83-x-65.97-66.55-66.58. Una serie que hizo honor a su estabilidad durante toda la temporada, a su condición de campeona panamericana en Toronto (65.39) a su pedigrí de líder del escalafón anual (70.65).

Intentó darle alcance con todo la croata Perkovic, víctima del desconcierto y con la presión por toneladas sobre sus hombros, la jaula se le estrechó, cometió tres fouls y no fue hasta el último envío que logró colarse en la segunda plaza, para romper un doblete de atletas en el podio por la Mayor de las Antillas, pues la santiaguera Yaimé Pérez (65.46) fue desplazada al cuarto escaño en ese intento del adiós.

Cuba mantuvo así su cadena de galardones consecutivos en el lanzamiento del disco, eslabonada entre el 2007 y 2013 por la pinareña Yarelis Barrios. La villaclareña Denia materializó por primera vez la escalada a la más alta de las premiaciones. La temporada aún no concluye, ahora su intención de quebrar el tope nacional de 70.88 metros en poder de Hilda Elisa Ramos se mantiene latente.

En este instante el sueño de coronarse en Río de Janeiro 2016 deja de ser una quimera. Sus músculos comprobaron la condición  humana de la Pérkovic para asestarle una estocada  a su dominio implantado desde los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Raúl Calderón, su mentor, vio coronar tantos años de trabajo minucioso sobre la técnica y otros elementos hasta la adquisición paulatina de la  maestría por parte de su alumna.

La jornada atlética para Cuba se completó con la clasificación a las semifinales de los 200 metros de los velocistas Roberto Skyers (20.29 segundos) y Reynier Mena (20.37). Por ahora se cuentan entre los 24 agraciados. Solo ocho largarán en la final, donde seguramente habrá segunda parte del suspense Usain Bolt-Justin Gatlin.

RUDISHA RECUPERÓ SU CETRO

El keniano David Rudisha recuperó su cetro de Daegu 2011 en una final de 800 metros demasiado lenta, donde con 1:45.84 dictó el ritmo sobre el polaco Adam Kszczot (1:46.08) y el bosnio Amel Tuka (1:46.30). Kenya no solo depende de sus fondistas, en los 400 c/v Nicholas Bett (47.79 segundos) ganó el cuarto cetro de la legión africana y comanda el ranking mundial de la disciplina. El ruso Denis Kudryavtsev (48.05) y el bahamés Jeffery Gibson (48.17), ambos con respectivos topes nacionales, sellaron el tridente de honor.

El británico Greg Rutherford (8.41 metros dorados) en longitud, y la etíope Genzebe Dibaba, dueña de los 1 500 metros planos (4:08.09 minutos), dominaron en correspondencia con sus calidades.