Argentina se hace justicia en los penales

El fútbol, ya se sabe, a veces puede ser así de veleidoso, porque Argentina, sin duda, fue más, mu­cho más que una descolorida versión de Colombia y desde luego no mereció sufrir tanto para avanzar a las semifinales de esta Copa Amé­rica, con un agónico triunfo en la tanda de penales (5-4).

El empate 0-0 durante los 90 minutos reglamentarios, más que un drama, había terminado siendo un monólogo albiceleste, con Messi, Pastore y compañía acaparando el balón, pese a que el entrenador de Colombia, José Pekerman, sorprendió sacando de entrada a Jackson Martínez por Radamel Falcao como punta de lanza, para intentar paliar la sequía goleadora de su equipo: solo un tanto en tres partidos.

Pero nada de nada. De hecho, Sergio Romero viviría uno de los partidos más plácidos de su carrera, siendo una de las noticias del segundo tiempo el primer tiro a puerta de los colombianos a la altura del minuto 65, un cabezazo centrado en un corner que el arquero argentino detuvo sin problemas.
Mientras, en el otro lado del terreno el encuentro se vivía con vértigo, ante la avalancha de ataques argentinos que acabaron por convertir al guardameta David Ospina en el héroe co­lombiano. Antes de la media hora este ya archivaba varias paradas milagrosas, como las dos que obró en una misma jugada, cuando repelió un remate envenenado del Kun Agüero a pase Pastore y acto se­guido desvió un cabezazo a bocajarro de Messi que había aprovechado su re­chace.

Por si fuera poco, ya en el segundo tiempo los palos se aliaban a su favor, cuando Banega estampó un disparo en la cruceta —que hubiera sido la anotación del torneo—, mientras Murillo sacaba sobre el mismo final un balón en boca de gol que planeaba remachar el Pocho Lavezzi.
Hasta que asomó la definición desde los 12 pasos y apareció, con aire justiciero, Carlos Tévez, para anotar el tanto de la victoria y vengar su fallo de hace cuatro años, después de que tres colombianos errasen ante Romero, y Biglia y Rojo perdonaran a Ospina.

Así que este sábado, le tocará el turno de buscar su pase a Brasil, sin Neymar, ante Paraguay en Concep­ción, en un remake de aquel duelo de cuartos que hace cuatro años vio a la canarinha fallar increíblemente sus cuatro lanzamientos en la tanda de penales.