Ciertamente eran otras las aspiraciones de la esgrima cubana en el Gimnasio USBI de Xalapa, pero en definitiva distaron de dominar la disciplina. Sus dos coronas y siete preseas de bronce no les alcanzaron para desbancar a Venezuela (5-6-1) y los anfitriones (3-3-4).
La cosecha bronceada en estos XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz se completó con los equipos de florete (f) y sable (m). Las damas fueron las primeras en marcar y derrotaron cómodamente a Guatemala 45-22 en la ronda inicial de competencias, pero cedieron ante las floretistas mexicanas en semifinales con marcador de 33-45.
Con el bronce como único horizonte posible, las nuestras encararon a sus similares de Puerto Rico, instancia donde el trío integrado por Angela Winter (bronce individual), Daylen Moreno y Elizabeth Hidalgo emergió airoso 45-31.
No muy alejado de ese libreto se comportaron los sablistas. El inicio prácticamente fue un paseo sobre República Dominicana 45-28. Eso, antes de ceder 43-45 a manos de Venezuela, en definitiva monarca luego de inclinar 45-38 a los anfitriones.
Daylon Díaz, Yoandri Iriarte y Noslen Montalvo, se encargaron de silenciar en la discusión del bronce a Colombia por 45-24. El desquite dorado azteca estuvo en las chicas del florete, superiores en toda la pista 45-20 sobre las morochas.
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