
SANTA CLARA.— Todas las novenas cubanas parten con el anhelo de ceñirse la corona nacional, pero algunas en particular cargan con un mayor peso sobre sus hombros por su trayectoria histórica. Ese pudiera ser el caso de Villa Clara, ganador de cinco trofeos en nuestros clásicos beisboleros, que en la presente lid tiene como meta, al menos, incluirse entre los cuatro punteros.
De cara a la actual campaña, el cuadro naranja cuenta con algunos veteranos y otras figuras jóvenes de cierto recorrido en la primera categoría, cuya principal aspiración es mantener la línea triunfal del territorio. “La primera meta es clasificar y después luchar por las medallas, para eso entrenamos, aunque este año la preparación fue algo atípica, pues no conocíamos la fecha de inicio del campeonato”, señaló a Granma el mentor Ramón Moré.
“Como regla general realizamos de diez a 12 semanas de entrenamiento, y ahora cubrimos los objetivos solo en ocho, detalle que de alguna forma puede incidir en nuestro rendimiento actual, pero no de forma significativa”, apuntó el estratega, al frente de la escuadra naranja por cuarta campaña consecutiva.
Por ahora el proyecto marcha con buen paso, sustentado en una excelente defensa —incluso ha fabricado dos jugadas de triple play— y un gran trabajo de los abridores, aunque se espera mucho más en lo relativo a la producción de carreras y la efectividad de los relevistas, lastres causantes de las tres derrotas del equipo, sin incluir el resultado nocturno del miércoles.

“Nos ha fallado más de lo normal el bateo con hombres en posición anotadora, y por ende, la producción de carreras. Hemos perdido ya tres encuentros por la mínima y no ha existido un apoyo significativo a los abridores, que han caminado en los partidos hasta donde tenemos previsto”, señaló Moré.
“No creo que sea un problema psicológico. Ellos están conscientes de la responsabilidad que tiene cada uno, y de un momento a otro conectarán a la hora buena, porque estamos hablando de muchachos con experiencia que saben ajustarse de acuerdo con las circunstancias”, aseguró el mentor villaclareño.
Para contrarrestar el déficit, el alto mando naranja pudiera contemplar la entrada de un joven que necesita oportunidades y continuidad para explotar sus dotes y desarrollar el talento. Hablamos de Leandro Turiño, quien ocuparía los puestos centrales del lineup, pues los hombres de “arriba” han cumplido con la misión de entrar en circulación, con destaque particular de Yordanis Linares, quien se ha embasado en 18 oportunidades y en siete de ellas ha llegado a posición anotadora.
Turiño, de 23 años y natural de Placetas, es un jardinero de excepcionales condiciones físicas y mucho poder, aspecto del que hoy adolece el conjunto titular (solo ha largado un cuadrangular en siete desafíos). Además, lo valoran como el clásico limpiabases, tal cual lo demostró en la pasada contienda al remolcar 22 anotaciones con apenas 21 inatrapables, según los números de Oscar Luis Portales, estadístico de la emisora provincial CMHW.
Otro aspecto con mucho margen de mejora para la tropa del centro del país es el pitcheo de relevo, entre los tres peores en promedio oponente, lo cual les ha impedido exhibir un balance más favorable. Para tener una idea de la escasa efectividad de los apagafuegos, Villa Clara ha perdido tres desafíos, todos por la mínima, en la última entrada y dos de ellos cuando se encontraban a un out del éxito.
Si los daños no han sido peores es gracias a la defensa, impecable, con un infield muy seguro y una línea central que bien pudiera incluirse entre las punteras de la nación, con el receptor Yulexis La Rosa, Andy Sarduy y Yamil Rivalta alrededor de la intermedia, y Yordanis Linares en el bosque del medio. Con tales armas y un salto de calidad en el resto de los renglones, los naranjas no tendrán problemas para luchar palmo a palmo por sus objetivos.

















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jg2g dijo:
1
2 de octubre de 2014
11:22:49
ANTLI dijo:
2
2 de octubre de 2014
16:01:46
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