
Como la línea central de una tanda poderosa, así se comportaron los luchadores cubanos del estilo libre en el mundial de Tashkent, pues con sendos bronces Liván López (74 kg) y Yowlys Bonne (61) siguieron los pasos del plateado Reinieri Salas.
Menuda demostración que los colocó en la sexta posición del medallero, superados por Rusia (5-0-1), Turquía (1-1-2), Azerbaiján (1-1-0), la República Popular Democrática de Corea (1-0-0) e Irán (0-3-2), como parte de las 14 naciones que tuvieron el privilegio de escalar al podio de premiaciones.
Ante la presencia de 34 hombres, Liván abrió con holgado 7-1 sobre el “alemán” Andriy Shyyka. Luego cedió de manera abrumadora por superioridad técnica de 2-15 a manos del nipón Sohsuke Takatani, quien en tarde de gala no paró hasta la presea de plata. Ese rendimiento del exponente del Imperio del Sol Naciente le permitió a Liván su acceso al repechaje, donde sin miramientos desbancó 8-2 al bielorruso Murad Gaidarov. En el crucial pleito por el bronce una avalancha cubana invadió el colchón para barrer 11-1 (superioridad) al georgiano Jumber Kvelashvili. El oro quedó en poder de otro ruso: la resurrección de Denis Tsargush, quien luego de coronarse en Herning 2009 y Moscú 2010, vio a Burroughs (bronce ahora) emerger. Todo este tiempo lo tuvo entre ceja y ceja hasta que de forma contundente lo derrotó 9-0 en la batalla semifinal.
El guantanamero Bonne calentó los motores con fácil 4-0 a costa del senegalés Jean Bernard Diatta, en octavos liquidó por la vía rápida 10-0 al indio Rahul Mann. Esa misma fórmula la aplicó al ruso Aleksandr Bogomoev en cuartos, antes de ceder en semis frente al azerí y en definitiva monarca Haji Aliyev por apretado 4-2. Bonne se repuso de ese desliz y en busca del bronce dejó sin opciones 8-2 al moldavo Andrei Perpelita. En calidad de subtitular culminó el iraní Mahrnoud Esmaeilpoorjouybari, en tanto el otro bronce se lo agenció el mongol Ochir-Nyam Enkhsaikhan.
Cerró el performance Javier Cortina (97) con la quinta plaza. Dos reveses truncaron la opción de una presea: otro ruso fue su primera pesadilla en octavos de final. Abdusalam Gadisov, a la postre rey, le endosó 8-0 y luego en la disputa del bronce el curtido turco Samil Erdogan lo doblegó con fácil 10-0 (superioridad).
Sin embargo, puede catalogarse de notable su rendimiento, con sonrisas de 14-4 (superioridad técnica) a costa del argentino Yuri Maier, y luego sobre el Xueyi Zhang, para equilibrar su balanza de victorias y derrotas.
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