Despedida con desquite

Para despedirse de la Copa Panamericana de voleibol, Cuba se desquitó 3-1 del revés que Canadá le propinó en las eliminatorias y envió a las perdedoras al sexto lugar de la competencia.

Desde el comienzo del desafío, las antillanas estuvieron debajo en la pizarra hasta llegar a 14-19, cuando reaccionaron para igualar las acciones. En empates sucesivos marcharon las dos selecciones (21-21… 22-22), momento en que las alumnas de Juan Carlos Gala se adelantaron 24-22 (¿ventaja decisiva?), pero desaprovecharon el filón y debieron halar fuerte tras la igualada a 24 que les obligó a ganar 26-24.  

Las cubanas plantaron distancia de 5-1 en los minutos iniciales de la segunda manga. Y créalo usted, la perdieron gota a gota (5-3…5-4…5-5…5-6…6-6) en un declive que les impidió remontar la cuesta, amén del desgaste extra. Canadá tomó el mando 17-15, y así, separadas cuando más por dos tantos, corrió la dicha a favor de las norteñas, 25-23.

Pausada se notó la salida para las caribeñas en el tercer parcial, 11-6, pero el brillo fue bajando hasta surgir el 14-14; sin embargo, en el segundo tiempo técnico Cuba dominaba 16-14. Una escapada 24-20, la primera del choque, les garantizó romper el estambre, 25-23.

Rápido despegue, 7-4, ilustró el cuarto tiempo, distancia aumentada a 20-13, en un camino que halló la meta en el 25-16 válido para conseguir el desquite del revés sufrido 0-3 en la eliminatoria.

La selección de Cuba, clasificada para el Grand Prix 2015, presentó durante la competencia un elenco regular integrado por la atacadora Melissa Vargas (ayer anotó 24 puntos), las auxiliares Jennifer Álvarez (2) y Sulian Matienzo (10 ), las centrales Alena Rojas (12 ) y Daymara Lezcay (11) con la pasadora Yamila (4) Hernández y Emily Borrel como líbero.

Puerto Rico-Argentina por el bronce y Estados Unidos-República Dominicana en busca del oro, peleaban al cierre de esta edición, todas también con boletos seguros para el Grand Prix 2015.