El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, aprovechó su intervención en la VII Cumbre de las Américas para agradecer a las autoridades de Panamá por la organización de la cita hemisférica, así como ofrecer solidaridad al pueblo de Chile ante las contingencias climáticas que vive ese país.
Señaló que tras la historia de 21 años de estas reuniones, por primera vez hoy en Panamá podemos decir que el anhelo continental se ha cumplido con la presencia de los 35 países de la región, entre los cuales está Cuba.
Se refirió al restablecimiento del diálogo entre Cuba y Estados Unidos como un proceso trascendental del cual México es un aliado, pues se considera amigos de ambas naciones. “La apertura al diálogo está cargada de futuro y posibilidades”, apuntó.
En sus palabras apoyó el proceso de paz en Colombia e hizo un llamado a la comunidad internacional para que acompañe este noble propósito.
Enfatizó que el mayor reto de nuestro tiempo es la desigualdad y que en la región este asunto tiene raíces ancestrales, que también se han visto agravadas por la concentración de las riquezas que no están acompañadas de políticas públicas adecuadas. “La exclusión no es una solución”, remarcó.
El desarrollo debe ser inclusivo y las políticas de cada país deben proteger a los más vulnerables, añadió.
Al respecto, se refirió a los cambios que se realizan en México a favor de la inclusión, para tratar de que no solo avance el país, sino que la sociedad toda.
Recordó cuando Bolívar convocó a reunirse en Panamá con el objetivo de alcanzar una integración política de América. Desde entonces, ha perdurado la solidaridad de nuestras tierras, resaltó, se ha privilegiado la unidad y la cooperación en nuestro continente. Sigamos impulsando el diálogo político y hagamos del bienestar un objetivo compartido, concluyó.









COMENTAR
Responder comentario