La vida contemporánea desarrolla cada vez con mayor frecuencia los sistemas de posicionamiento satelital, medios que permiten, con alta precisión, ubicar a cualquier dispositivo o persona en la Tierra.
El Sistema de Posicionamiento Global (GPS) determina el lugar de cualquier objeto, persona o vehículo con una precisión de hasta centímetros, aunque lo habitual son unos pocos metros. Fue desarrollado por el Departamento de Defensa de Estados Unidos y necesita, para su funcionamiento, de cuatro satélites.
El gps funciona mediante una red de, como mínimo, 24 satélites alrededor del planeta, a una altura de aproximadamente 20 000 kilómetros, con órbitas distribuidas para que en todo momento haya al menos cuatro satélites visibles en cualquier punto de la geografía global.
Estados Unidos, como parte de su doctrina militar, ha planteado que en caso de conflicto podría «apagar» el sistema gps por ser de su propiedad y, además, desarrollado por sus fuerzas armadas. Es fácilmente comprensible el caos que generaría una decisión de ese tipo, lo cual explica cómo otras
potencias no se han quedado de brazos cruzados y han desarrollado sus propios sistemas como forma de independizarse.
La antigua Unión Soviética construyó un sistema llamado Glonass, ahora gestionado por la Federación de Rusia; la Unión Europea desarrolló el sistema de navegación Galileo, y la República Popular China implementa su propio sistema de navegación, denominado Beidou que, una vez operativo plenamente en 2020, deberá contar con 30 satélites.
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@ppCARLITOS dijo:
1
28 de mayo de 2020
10:38:17
Mercedes dijo:
2
28 de mayo de 2020
12:47:13
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