
La hipermetropía, dice la doctora Dayamí Pérez Gómez, es un defecto refractivo en el que cuando la capacidad de enfoque (acomodación) se encuentra relajada, la imagen captada por el ojo se enfoca en un punto por detrás de la retina (zona con células especializadas para captar la imagen nítidamente y enviarla al cerebro).También se conoce como hiperopía. Es un defecto óptico refractivo que, según su grado, dificulta la visión de cerca y de lejos.
Este trastorno se presenta con elevada frecuencia. En la literatura se reporta que aproximadamente el 55 % de la población mundial la padece en diferentes grados, aunque en Cuba no existen reportes estadísticos de su prevalencia.
Nuestra entrevistada es especialista en Oftalmología, responsable de la Unidad de Cirugía Refractiva del Hospital Clínico Quirúrgico, Centro de Posgrado Hermanos Ameijeiras.
—¿Se conocen las causas que originan ese defecto refractivo?
—Son disímiles, desde ojos de pequeña dimensión, las córneas planas, o por la disminución del índice de refracción del cristalino y aumento del índice de refracción en el vítreo (hipermetropía por enfermedades como la diabetes mellitus).
Otra causa la constituye la cirugía de catarata, si no se coloca una lente intraocular que hace una función similar a la del cristalino. También puede aparecer relacionada con trastornos orgánicos como edema (hinchazón) en la retina o tumores oculares.
—¿Es un trastorno que se presenta desde el nacimiento o se desarrolla con el decursar de la vida?
—Normalmente nacemos con una hipermetropía fisiológica de aproximadamente dos dioptrías. Con el crecimiento del niño y sus ojos que también crecen, la refracción se puede normalizar hasta la ausencia de defecto refractivo. Pero hay personas a las que un defecto del desarrollo del ojo les trae como consecuencia una hipermetropía que se expresa más tarde en la vida.
—¿Se hereda al menos la propensión de este padecimiento?
—La hipermetropía es generalmente hereditaria y en el caso de las altas hipermetropías se puede ver relacionada con alteraciones congénitas del globo ocular.
—¿Constituye un factor de riesgo para la aparición de alguna enfermedad ocular?
—Sí, puede ser un factor de riesgo para el desarrollo del Glaucoma por cierre angular, con más frecuencia en el sexo femenino. Si no es corregida a tiempo (antes de los dos a ocho años) puede ocasionar insuficiente desarrollo de la visión del ojo más hipermétrope (ambliopía), y también se relaciona con el estrabismo sobre todo en los niños.
—¿Hay síntomas y signos, tanto en la niñez como en la adultez, que nos puedan poner en alerta de la presencia de una hipermetropía?
—De forma general los pacientes hipermétropes pueden referir dolor ocular ligero con sensación de peso sobre las cejas y cefaleas relacionadas con los esfuerzos visuales, fatiga ocular, visión borrosa de objetos cercanos, aumento del parpadeo, prurito (picazón), enrojecimiento y ardor en los ojos, enturbiamiento de la lectura, aparición de inflamaciones como conjuntivitis, orzuelos o chalazión a repetición, entre otros. La visión (agudeza visual) del paciente hipermétrope varía de buena a mala según la edad del sujeto y el grado de la hipermetropía.
—¿Cómo se establece el diagnóstico de certeza?
—Debe medirse la agudeza visual sin corrección, examinar al paciente en la lámpara de hendidura, explorar los anexos oculares y los movimientos oculares, hacer el fondo de ojo, toma de la tensión ocular y realizar la refracción en los menores de 40 años con dilatación de la pupila, fundamentalmente.
—¿Cuál es la terapéutica de elección para estos pacientes?
—El tratamiento puede ser con espejuelos o gafas con cristales graduados, con lentes de contacto o con cirugía refractiva.
—¿En qué consisten estas intervenciones quirúrgicas? ¿Con qué éxito se desarrollan?
—Existen dos formas fundamentales para la corrección quirúrgica: la cirugía con láser de la córnea y la cirugía de extracción del cristalino con catarata o transparente con implante de un lente intraocular. Ambas se desarrollan con éxito, si se cumple rigurosamente con los criterios de selección de una técnica u otra.
—¿La corrección por la vía quirúrgica es de forma transitoria o definitiva?
—Es definitiva en la mayoría de los casos, según la edad en que se opere y la magnitud del defecto que se pretenda corregir con las diferentes técnicas. En los resultados predomina la individualidad.
—¿Le quedaría algo esencial por señalar?
—Subrayar la importancia del examen del niño antes de la edad escolar para prevenir y corregir a tiempo enfermedades que pueden afectarlo y limitarlo durante toda la vida. De ahí la importancia del chequeo previo a la entrada al círculo infantil que muchos padres lo ven como una rutina o un obstáculo y no le dan la importancia que merece.









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Ernesto Gainza Lezcano dijo:
1
29 de diciembre de 2014
08:27:41
ricardo dijo:
2
29 de diciembre de 2014
12:53:16
Yunetsy dijo:
3
16 de enero de 2015
15:08:46
Maria da Silva dijo:
4
23 de agosto de 2019
17:22:59
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