ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA
Rodolfo Sánchez ha trabajado con sus voleibolistas sobre la unidad y el respeto. Foto: Trabajadores

KATOWICE, Polonia.—En la calle, la inmensa mayoría los juzgan únicamente por los resultados del equipo que dirigen. La victoria tiene muchos padres; la derrota suele ser huérfana. También podría decirse que en el revés salen a relucir las una y mil críticas de las que los directores técnicos no escapan.

Un hombre puede ganar varios torneos o campeonatos de manera consecutiva al frente de una provincia o país, en cualquier deporte, especialmente en los colectivos, y quizá a la hora del comentario las palmas sean solo para los deportistas, por supuesto, la arcilla esencial del espectáculo.

Y detrás de cada una de esas hazañas está la mano de un equipo de dirección que toma las riendas de las vidas de muchos jóvenes para conducirlos hasta la gloria, sin reclamar lauros, comprometido con su nación y por la realización personal de saber --cuando uno o varios de esos muchachos brillen-- que en sus éxitos queda grabada la huella de quienes los entrenaron desde pequeños hasta encumbrarse.

Conversaba por estos días acá, en el Campeonato Mundial de voleibol, con Rodolfo Sánchez, quien junto a otro veterano exjugador, Víctor García, conducen al seleccionado de Cuba en el evento, y mientras hablábamos pensé cuán difícil resulta para ellos tener que requerir durante los partidos a los jóvenes, novatos en su mayoría, para corregirles elementos técnicos u otras faltas, y, una vez terminado el encuentro que quizás perdieron, entonces tenderle el brazo sobre el hombro, hablarles, explicarles, enseñarlos a analizar dónde estuvieron los errores, como también mostrarles los buenos modales que distinguen las relaciones interpersonales.

Hasta este día en que se escriben estas líneas, los cubanos no han triunfado en sus dos desafíos efectuados en el Mundial. Sin embargo, Rodolfo y Víctor no han perdido la ecuanimidad, ni ese instinto de maestros de inculcarles a sus alumnos los deseos de salir adelante, asimilando los secretos técnicos en este ámbito internacional, en el que una mayoría de voleibolistas menores de 21 años pretende abrirse paso entre los 24 equipos mejores del planeta.

Vendrán decisiones difíciles de sustituir a unos por otros sobre el terreno. Sin embargo, a pesar de la contrariedad que puedan causar esos cambios, he apreciado hermandad entre los 12 jóvenes que componen el equipo Cuba, no existen diferencias, ni envidias, tampoco pequeños grupos entre ellos que causan tanto daño al pensamiento y la unidad de cualquier colectivo. Se respira un aire saludable de respeto de los muchachos hacia sus profesores, reflejado, por citar un ejemplo, en el estricto cumplimiento de los horarios para realizar cada tarea.

Restan tres partidos en esta primera vuelta eliminatoria del Mundial. Los cubanos jugarán contra Sudcorea, Túnez y Brasil, por ese orden. Los sudamericanos, tricampeones del orbe desde el 2002, se ven inalcanzables; no obstante, los sudcoreanos y tunecinos pueden ser vencidos. Y de seguro ahí estará la recompensa para los que conducen los partidos desde fuera del terreno.

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Rudy Vega dijo:

1

3 de septiembre de 2014

17:01:48


Buen comentario Alfonso. Siempre se olvida la excelencia pedagógica cuando se alcanza un triunfo y muchas veces somos injustos sin tener en cuenta que a partir de muchas dificultades no se tiene el resultado querido. Por suerte tenemos excelentes entrenadores, sino que hablen los resultados de Eugenio, Samuels, Gilberto Herrera, Ñico, Calderón, etc ¡y son los conocidos!, ¿qué quedará para los entrenadores de la base?. Saludos

César dijo:

2

3 de septiembre de 2014

20:01:38


Bueno artículo, al menos con la tristeza podemos ahogar nuestras lágrimas con los artículos de Alfonso N. Pero con todo y eso no ponen un parche al sangra miento del voley cubano ya hace más de 5 o 6 años cada vez peor. Yo lo único que quiero es sentirme orgullos de nuestro voleybal un tesoro nacional y logro cubano .. Estamos perdiendo y seguiremos así por mucho tiempo más no vale con el mejor entrenador del mundo y con las mejores intenciones del mundo. Hay que convocar a tomar otras medidas para se ponga el parche al sangrado porque ahora no para y veo que la luz en el túnel está muy lejana.. Ya son muchos años padeciendo de la misma enfermedad y no se hace nada por encontrar una cura ...cuando más optimistas estamos viene el terremoto otra vez ...como decían los narradores americanos del canal beinsports sobre el equipo cubano es claro que ellos no saben que pasaba pero ellos decían que no podían entender como el equipo cubano subcampeón de el pasado mundial allá bajado tanto de nivel.. Claro ellos no conocen la situación de ese equipo del 2010...y todos ellos se preguntaban y trataban de encontrar una explicación para la superpotencia súper power como dicen ellos de Cuba en el volleyball mundial. Que ha pasado...

pABg0nZ dijo:

3

4 de septiembre de 2014

11:02:48


Yo sí creo que los preparadores extranjeros conocen de la situación cubana actual del voleibol, pero es una manera de provocar a darles una respuesta para demostrar aspectos negativos del sistema cubano. Un entrenador o un periodista deportivo normalito se interesa por todo cuanto tenga que ver con su deporte y si es el técnico de un equipo nacional, más interés debe tener. Todos ven a los atletas cubanos jugando en ligas europeas, asiáticas o brasileñas, y yo personalmente pienso que esa forma de proceder por parte de Cuba, es una razón de la mala reputación de los dirigentes deportivos cubanos. Cuando al equipo cubano se la ponen más difícil que a Italia, por ejemplo se empieza a lamentar que si el dinero es el que manda, etc. y la televisión pero Cuba con esa política está frenando el desarrollo de los atletas y haciendo perder valor a las competencias porque asisten solo por aistir. Los dirigentes del voleibol mundial no pueden decirle a nadie que ellos desconozcan la política deportiva cubana, específicamente de negarles el derecho a jugar en el equipo nacional y hasta no permitirles entrenar a cuanto/-a atleta haya pedido la baja porque quería probarse en una de esas ligas, pero aunque ellos no pueden prohibirle a Cuba esas medidas, s í pueden tenerlas en cuenta a la hora de tomar decisiones que afectan a los intereses cubanos, como es ubicarlos en grupos más difciles, no reaccionar positivamente a reclamaciones, etc. Para colmo los atletas que juegan en otros países no son ni mudos ni tontos, y si alguien les preguntase en estos días a alguno de ellos por qué está de vacaciones y no jugando en el mundial seguramente van a contar los motivos. En Cuba durante muchos años la condición de ser una isla ayudaba a que las cosas que suceden no se conocieran en el mundo, ahora es mucho más difícil ocultar esos problemas. Más que son asuntos que saltan a la vista. Por otro lado a los preparadores de los diferentes equipos les gusta más para aumentar el prestigio decir que le ganaron a los medallistas de plata del mundial, pero lo que no dicen es que entre el equipo del mundial de 2010 y este del 2014 hay una diferencia que mayor no podría ser. Lo que los genios que toman esas decisiones aún no han notado a pesar de tratarse de una repetición de lo mismo desde hace más de 10 años es que todo eso se convierte en un círculo vicioso. Un atleta con algo de experiencia, por lo regular en la mejor edad deportiva quiere jugar en el extranjero, para ello debe pedir la baja del equipo, esto Cuba lo considera una traición, por lo que al atleta no solo se sanciona sino que hasta se ponen rumores en ciurculación sobre supuestas indisciplinas, eso afecta al atleta seguramente como persona con lo que se siente con más razón de haber pedido la baja e irse a otro lugar a jugar a ganarse el dinero. Cada atleta que se marcha debilita el equipo y no solo es que se hace necesario quemar etapas, es que al final falta el atleta que sirva de ejemplo a imitar en el equipo, como el equipo siempre se debilita más y más los atletas que actualmente juegan, se cansan de ir a competencias solo a perder y siguen el mismo camino. Y la federación a empezar de nuevo y tirar el dinero en la basura porque vuelve a pasar lo mismo por falta de visión y de poder de reflexión de los que pueden decidir. Qué más les da, sea el equipo que sea los viajes y su salario así como otros privilegios por ser dirigentes deportivos están asegurados.