
Cuando tuve la oportunidad de conversar con la escritora italiana Bianca Pitzorno, no pude dejar de preguntarle, sabiendo que se trataba de una autora de obligada referencia en el mundo de la literatura infantil, sus impresiones sobre el libro Corazón, de su compatriota Edmundo de Amicis, uno de los más célebres autores de Italia, traducido a todos los idiomas del continente.
En la respuesta, la escritora ofreció razones para preferir al Pinocho de otro italiano memorable, el escritor Carlo Collodi, antes que a Enrico Bottini, el niño cuyo diario engrosa las páginas de Corazón. «Pinocho es más creíble, aunque sea un muñeco de madera», me dijo. La Pitzorno se refería a esa casi perfecta estampa del narrador principal de Corazón. Recordemos que junto al diario que escribe el estudiante de primaria de una escuela en Turín, en la obra aparecen otras narraciones, como los cuentos mensuales y las cartas escritas por sus padres y hermana a Enrique, destinadas a aconsejarlo y evaluar sus actos.
Cierto es que la obra, publicada en 1888, y ampliamente difundida desde su aparición, no escapó de miradas críticas que apuntaron, por ejemplo, al realce de valores burgueses en su corpus; sin embargo, nadie negaría que asomarnos a estas páginas, cuyo título no podría ser más eficaz, es un bálsamo para el espíritu, en cualquiera de las latitudes donde la raza humana haya hecho nido.
Desde los ojos de un niño de clase acomodada que comparte el aula con sus compañeros, de entre diez y 14 años, el libro nos pondrá al tanto no solo de la vida propia sino también de la de los otros.
De Amicis se las ingenia para arrancar la emoción del pecho del lector. La agitación aparece desde las primeras líneas, cuando a partir de lo que se lee –sea para remarcar la inocencia, la solidaridad, el afecto, el gusto que se experimenta ante la actitud magnánima– uno siente la necesidad de no apartarse de ellas. Se está consciente de que se asiste a un portento de humanismo en el que queremos involucrarnos. El niño o adolescente sensitivo que se acerque a Corazón hallará su igual entre estos personajes y sabrá a qué talla de estas pertenecen sus amigos. El adulto no podrá enmendar su pasado, pero sin duda tendrá en las actitudes «leídas» un modelo de civilidad, conducido por estos seres resortes que no solo «halan» hacia el bien, sino que exhortan a acometerlo.
Preciso es cerrar estas líneas, donde debe recordarse que Corazón es el título seleccionado por el más reciente espacio el Libro del mes, del Instituto Cubano del Libro. Ve la luz por la editorial Arte y Literatura (Ediciones Huracán). Hagámoslo con un fragmento de uno de los más hermosos parlamentos, tomados de Corazón, que en nombre del amor patrio se han escrito.
¡Tú no puedes sentir aún en toda su intensidad ese grande afecto! (...). Lo sentirás en alguna gran ciudad lejana, en el impulso del alma que te empujará entre la multitud desconocida hacia un obrero oscuro, del cual hayas oído, pasando a su lado, una palabra italiana. Lo sentirás en la indignación dolorosa y profunda que te hará subir la sangre a la cabeza cuando oigas a algún extranjero injuriar a tu país. Lo sentirás más violento y más vivo el día en que la amenaza de un pueblo enemigo levante una tempestad de fuego sobre tu patria y veas brillar las armas por todas partes, correr los jóvenes a alistarse en las filas, los padres a besar a los hijos, diciendo: «¡Ánimo!» y las madres despedir a los jóvenes, gritando: «¡Vence!».









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KPR dijo:
1
29 de mayo de 2019
09:36:16
Madeleine Respondió:
29 de mayo de 2019
20:26:15
marlen dijo:
2
29 de mayo de 2019
10:03:12
Daniel Noa dijo:
3
29 de mayo de 2019
11:49:48
isora dijo:
4
29 de mayo de 2019
14:58:56
mirelys dijo:
5
3 de junio de 2019
10:14:21
yoelia dijo:
6
3 de junio de 2019
14:42:46
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