Dibujos del Moncada
Estos dibujos con la firma de H. Maza fueron publicados en un suplemento gráfico, en colores, del periódico Revolución. El dibujante hizo esbozos de momentos extraordinarios de los hechos del 26 de Julio y del juicio del Moncada a partir de testimonios orales, descriptivos de Haydée Santamaría, Melba Hernández, Marta Rojas y Baudilio Castellanos, quienes luego darían fe del extraordinario acercamiento a esos momentos, que no pudieron ser captados por ninguna cámara fotográfica

En el apartamento de Abel y Haydée Santamaría en 25 y O, en el Vedado, se reúne la Dirección del Movimiento revolucionario, para los preparativos del asalto al Moncada.
Momentos en que los futuros asaltantes del Moncada, encabezados por Fidel, van a salir de la Granjita Siboney hacia la acción del 26 de Julio.
El combate en la posta 3 del Moncada, bajo el mando de Fidel.
Una escena en la puerta principal del hospital Saturnino Lora. Haydée y Melba salen para recoger y auxiliar a un militar herido, era el teniente Fereaud (se sabría más tarde).
Momento en que los soldados del Moncada, luego de ocupar el Hospital Civil, sacan a los jóvenes asaltantes. Se muestra a Abel con una venda en un ojo. Para tratar de salvarlo, una enfermera de la sala de Oftalmología trató de hacerlo pasar como enfermo.

En el Palacio de Justicia. El 21 y 22 de septiembre, el joven abogado Fidel Castro, luego de ser examinado como acusado, asume su defensa e interroga a sus compañeros, quienes denunciaron las torturas y crímenes. Fidel se convertía de acusado en imbatible acusador. También interrogó a otros encartados en la Causa 37 del Tribunal de Urgencia. Aparece con toga en el estrado de los abogados.

El propio doctor Fidel Castro, el 16 de octubre en la pequeña sala de estudios de las enfermeras. Aparecen de espalda, los magistrados. Los abogados de la defensa: Baudilio Castellanos, abogado de oficio, defensor del asaltante Abelardo Crespo (en la cama fowler, herido en un pulmón), el defensor de Gerardo Poll Cabrera, un obrero ferroviario involucrado en la Causa 37, acusado que nada tuvo que ver con el asalto y otras personas, entre ellas Adolfo Alomá Serrano, oficial de sala, otro funcionario del Tribunal y a la izquierda los seis periodistas. La salita fuertemente custodiada por los militares.