Con el volumen El libro de las ausencias,
presentado por Ediciones Luminaria en la XVII Feria Internacional del
Libro, esta narradora logra llamar la atención más allá de mudas en
espacio, tiempo y narrador y de ambientes, más marginados que
marginales.
Se trata entonces de todo lo que no es y puede ser,
del subconsciente que traiciona, del otro yo que se desdobla y termina
por cambiarnos la identidad cuando no se lleva firme. Del presente
real que debe construirse sobre el pasado infeliz, de aceptaciones
"incoherentes y traumáticas".
Así lo ha pretendido esta joven escritora espirituana
que desanda además los caminos de la décima y el ensayo. Y aunque no
es una obra autobiográfica, Yanetsy sabe de esas ausencias que han
sido, porque el camino de las letras no la circunscribió a la elite
que suele apartarse del barrio. Los influjos populares viven en los
minicuentos e historias que "llegan sin ser perseguidas".
El humor, "explícito cuando se escribe de forma
irreverente", intenta disminuir el dramatismo de los personajes y
aparece entonces como suerte de alivio ante tanta otredad. Burlas a lo
absurdo y a lo normal, dos fronteras que en El libro de las
ausencias resultan magistralmente difusas, logran más allá de
actitudes concurrentes una realidad sujeta a disímiles puntos de
vista.
El erotismo, insinuación desde la sugerente portada,
es visto por momentos como desdicha que trunca con asombros los
juguetes que Lucía (adolescente) nunca ha podido tener. Su madre
condiciona una familia disfuncional en la que los desaciertos y las
ausencias trazan la cotidianidad.
Para Yanetsy Pino "las ausencias pueden causar efectos
al tiempo que hay efectos que pueden causar ausencias". Así, la
conceptualización filosófica deviene dialéctica que impone a la
escritora narrar la historia desde las individualidades de cada
personaje que varía constantemente ante cada situación.
Recurrente y hasta forzada figura en la obra la
presencia de Borges, Cortázar y Bioy Casares, que Yanetsy "justifica"
como pretextos innegables de su influencia literaria.
El libro de las ausencias, Premio de la Ciudad de
Sancti Spíritus 2006, da fe de un talento que apenas comienza a
emerger. No obstante, esta licenciada en Letras, a los 30 años de
edad, desecha el camino de lo reconocido y tradicional y se alista en
las experimentaciones formales, esencialmente desde la perspectiva de
género. El libro¼ así lo corrobora.