Tomar
conciencia de la existencia de manifestaciones de desigualdad y
discriminación racial en el país, secuelas del coloniaje, el
neocoloniaje y otras causas, es el primer paso para enfrentar esta
problemática social, destacó Abel Prieto, asesor del Presidente de
los Consejos de Estado y de Ministros, en la Comisión de Educación,
Cultura, Ciencia y Tecnología. Lo segundo, precisó, es combatirlas
desde edades bien tempranas, con eficaces instrumentos educativos y
culturales.
A este objetivo, contribuyeron los talleres-debate efectuados en
Matanzas, Mayabeque, Ciego de Ávila, Pinar del Río y Las Tunas, en
los que se analizaron las subsistentes desigualdades por el color de
la piel; el olvido o poco reconocimiento de la memoria histórica del
aporte de los hombres y mujeres negros; y las asimetrías en
distintos sectores de la vida económica y política.
Heriberto Feraudi, presidente de la Comisión José Antonio Aponte,
de la UNEAC, señaló que la experiencia en los talleres ha sido
altamente positiva, y la obra de la Revolución cubana en este
sentido, colosal. Aunque no estamos conformes, aclaró, subyacen en
nuestro acervo cultural, económico y social, signos de esta
problemática: debatirlos abiertamente, es síntoma de andar por el
camino correcto para su enfrentamiento.
Al respecto, los diputados Omar Felipe Mauri, Miguel Enrique
Charbonet y Mirta Millar, propusieron —y quedó acordado— darle
seguimiento al tema en la próxima legislatura, imprimiéndole mayor
profundidad al análisis desde la perspectiva educacional; y extender
la realización de los talleres-debate al resto de los territorios.
Los miembros de la Comisión, en la que se encontraba también
Rafael Bernal, ministro de Cultura, coincidieron en que corresponde
a los medios de comunicación masiva, y a los sectores de la
educación y la cultura, una responsabilidad enorme en este esfuerzo.
Sin que se convierta en una campaña, se trata de trabajar y hacer,
apuntaron.