A pesar de la cínica confirmación, la OTAN insistió también en
que las fuerzas aliadas han logrado "implementar con éxito" la zona
de exclusión aérea sobre Libia, y el embargo de armas.
Desde Trípoli, el líder libio, Muammar al Gaddafi, advirtió a la
alianza imperialista que si no pone fin a sus operaciones en el país
"enfrentarán una catástrofe".
En un nuevo mensaje dirigido por teléfono a seguidores que se
reunieron en la plaza Verde de Trípoli, Gaddafi aconsejó a los
países de la coalición internacional que "retiren sus aviones y
mantengan discusiones con el pueblo libio", a la vez que criticó la
orden de arresto dictada el lunes por la Corte Penal Internacional
(CPI), según Europa Press.
Las afirmaciones de Gaddafi se produjeron mientras miles de
libios salían a las calles para manifestarle su apoyo, portando
pancartas contra la intervención extranjera y mostrando las fotos de
los civiles muertos por los bombardeos de la OTAN, reportó Telesur.
En una resolución, la Unión Africana (UA) "decidió que los
Estados miembros no cooperarán en la ejecución de la orden de
detención" contra Gaddafi y pidió al Consejo de Seguridad de la ONU
"aplicar las disposiciones para anular el juicio del CPI sobre
Libia".
La UA señala que "la orden de detención (...) complica seriamente
los esfuerzos destinados a hallar una solución política negociada a
la crisis en el país norafricano y a tratar los temas de impunidad y
de reconciliación para tomar en cuenta el interés mutuo de las
partes concernidas", cita AFP.