El
dossier completo de la investigación de la armadora francesa CGT
sobre el atentado del barco La Coubre, cuya responsabilidad se
atribuye a la CIA, se encuentra en la caja fuerte de una fundación
marítima francesa, con prohibición de comunicar fijada a 150 años
por los servicios jurídicos de los últimos dueños del buque.
El expediente, cuya existencia quedó hasta ahora desconocida,
duerme desde casi medio siglo en el enorme fondo de archivos de la
Compagnie Générale Transatlantique (CGT), también conocida como
French Line, dueña de la Coubre en el momento de la tragedia en La
Habana.
La CGT se integró en 1973 a la Compagnie Générale Maritime,
empresa estatal que fue privatizada luego y cedida a un consorcio
hoy conocido como CMA CGM. La propiedad jurídica y la administración
del fondo de archivos de la CGT fueron confiadas en 1995 a una
fundación en cuyo consejo de administración de 16 miembros se
encuentren dos representantes de CMA CGM.
Esta fundación llamada "Association French Lines", maneja, con el
propósito de garantizar la conservación del patrimonio marítimo
francés, un servicio de investigación histórica de distintos fondos
de empresas de navegación, en su sede ubicada en la calle Lucien
Corbeaux de la ciudad portuaria de Le Havre.
Entre las más de 30 000 fichas del archivo de la fundación, 79
contienen referencias a los distintos momentos de la existencia de
La Coubre. Uno que lleva el número 22091, integrado al fondo en
1997, tiene la descripción siguiente: "La Coubre. Explosión en La
Habana, reparaciones, fotografías, artículos de prensa, lista de
desaparecidos, informe al comité de dirección, condiciones de
aseguramiento, correspondencia".
Este dossier cuyo contenido parece del más alto interés para el
conocimiento de detalles inéditos del acto terrorista de La Habana,
tiene como origen los Servicios Jurídicos de la desaparecida CGT y
está marcado ante la mención "Comunicabilidad", con la asombrosa
prohibición: "COMUNICABLE 150 AÑOS".
La existencia de tal fondo de información sobre el crimen de La
Coubre, por cierto, constituye un elemento misterioso más en la tela
de enigmas que rodea el acto terrorista más importante del siglo en
el continente.
Ocurrido hace exactamente 51 años, el 4 de marzo de 1960, el
atentado terrorista de La Coubre ocasionó además de un centenar de
muertos, entre ellos seis miembros franceses de su tripulación, más
de 200 heridos y numerosos desaparecidos. El costo de los daños
materiales fue luego estimado en unos 17 millones de dólares.
Cuba ha denunciado en numerosas oportunidades, la responsabilidad
de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) estadounidense en la
explosión de La Coubre en el puerto de La Habana.
En las horas después de la explosión, el líder cubano Fidel
Castro presidió un acto histórico en la Plaza de la Revolución, en
el cual expresó su convicción de que la mano de la CIA, que ya se
mostraba muy agresiva contra Cuba, se encontraba detrás del crimen.
Bautizado el 16 de abril de 1948 por el astillero Canadian
Vickers Ltd de Montreal, Canadá, la Coubre realiza desde el 11 de
octubre de 1951 recorridos entre Francia, Antillas francesas,
América Central y Estados Unidos.
La Coubre fue remolcada el 22 de agosto de 1960 fuera del puerto
habanero por el barco neerlandés Ooostzee hacia Rouen, Francia,
donde los Chantiers de Normandie reconstruyen la parte destruida. El
barco retoma sus servicios el primero de abril de 1961. La Coubre se
llamará luego, sucesivamente Barbara, Notios Hellas, Agia Marina
antes de ser vendido a finales de 1979 por el valor del metal a una
empresa española de Gandia (Valencia) que lo demolió.
El gobierno de Estados Unidos, más de medio siglo después, sigue
sin entregar documentos de sus archivos secretos relacionados con La
Coubre.
"No es posible haber ignorado las circunstancias en que se vieron
involucrados varios norteamericanos", afirma el doctor José Luis
Méndez Méndez, reconocido historiador del terrorismo contra Cuba, al
enumerar una larga lista de elementos sospechosos que vinculan a
Estados Unidos a los acontecimientos.
"Se tiene que haber investigado de oficio este crimen", afirma.
Los 22 sobrevivientes franceses de La Coubre fueron luego
repatriados a Francia por barco.
Seis marinos franceses dejaron sus vidas en la criminal
explosión. El primer teniente François Artola, el timonel Jean Buron
y los marineros Lucien Aloi, André Picard, Jean Gendron y Alain
Moura murieron, víctimas de este cínico gesto de agresión.