LA PAZ, 14 de julio (PL) .— La Corte Interamericana de Derechos
Humanos (CIDH), cuyas sesiones continúan hoy aquí, conminó al ex
ministro boliviano del Interior, Luis Arce Gómez, que revele el
paradero de los desaparecidos de la dictadura que comandó
(1980-1981).
El llamado "ministro de la cocaína" y brazo derecho del gobierno
de facto de Luis García Meza, escuchó la víspera una sentencia de 30
años de privación de libertad sin derecho a indulto, pero evitó
aportar detalles sobre los asuntos juzgados.
"Es un deber de las personas responder ante los tribunales; con
mayor razón cuando es sentenciado por la justicia", señaló el
vicepresidente de la CIDH, Diego García.
Cuando Arce Gómez estuvo detenido desde 1989 en una cárcel de
Estados Unidos por delitos de conspiración y narcotráfico, dijo
conocer el paradero de los restos de los desaparecidos,
especialmente del líder socialista, Marcelo Quiroga Santa Cruz.
A las pocas horas de llegar a Bolivia, 19 años después que fuera
entregado a las autoridades, el reo, a través de su abogado Mirko
Suaznabar, adelantó que podría aportar datos a cambio de una
revisión de su condena o "anulación" de la misma.
La propuesta no fue considerada por el Ejecutivo por considerarla
un chantaje, como afirmó el vocero gubernamental, Iván Canelas.
"Ese pedido nos confirma una vez más que Arce Gómez conoce dónde
fue conducido el cuerpo de Quiroga Santa Cruz luego de su
asesinato", recalcó Canelas.
Indicó que por moral, debería, sin chantaje alguno, decir dónde
están los restos del dirigente socialista y los de otros líderes
como Carlos Flores y Gualberto Vega, desaparecidos en la década de
1980.
También el viceministro de Coordinación con los Movimientos
Sociales, Sacha Llorenti, aseguró que Arce Gómez cometió el delito
de desaparición forzada, extremo por el que no habría sido juzgado.
"La propia jurisprudencia señala que la desaparición forzada de
una persona constituye un acto de tortura en contra de los
familiares al no revelarse el paradero del desaparecido", afirmó.
Arce Gómez arribó a la nación andina el pasado jueves deportado
de Estados Unidos para cumplir la pena, impuesta aquí en ausencia en
1993.
El ex coronel del ejército fue procesado en Bolivia en rebeldía.
De ahí que ahora se hace haces pública la sentencia condenatoria,
dijo el juez de ejecución penal José Ayaviri, quien leyó el
dictamen.
Tras la llegada al país, Arce Gómez fue recluido en una cárcel de
máxima seguridad (Chonchocoro), el mismo penal en el que cumple su
condena García Meza, responsable de las jornadas sangrientas de la
asonada del 17 de julio de 1980.